lo módico a veces sorprende

Cuando tienes un coche con unos añitos a las espaldas que no usas demasiado, te piensas dos veces antaño de hacer una inversión más allá de lo estrictamente necesario. Así, te puede acaecer que tengas una radiodifusión que funcione perfectamente y no te plantees cambiarla por una doble DIN. Pero hay una ingenuidad: ver la ruta con una pantalla con Android Utilitario (o Apple CarPlay) es más cómodo que tirar del móvil y un soporte. Aunque hay opciones para colocar pantallas sin instalación bastante premium, hemos comprado una pantalla en AliExpress baratísima y esta ha sido nuestra experiencia.

Diseño trotón pero cumplidor

Las presentaciones. Esta es una pantalla de siete pulgadas con resolución HD de dócil colocación mediante un sistema de ventosa y adhesivo al salpicadero del coche, lo que permite ponerla y quitarla según lo necesites. Así, viene con un bienhechor para ajustar a nuestro estilo y una ventosa.

El tacto y la calidad militar es muy muy plasticosa: es módico y se nota. Una vez montado, la placa trasera queda visible por las rejillas de la parte posterior, por lo que el diseño no es lo más discreto y cuidado. 

Pero al menos cumple en lo más importante: la ventosa es muy potente, por lo que el sistema no se ha movido durante los trayectos en los que lo hemos usado y encima ponerla y quitarla resulta de lo más dócil y rápido.

La pantalla viene sin chico físicos y la verdad, de vez en cuando no vendrían mal para algún momento en el que se queda bloqueado, pero normalmente siquiera los hemos acostado de menos. 

A los lados encontramos los puertos – imprescindibles para funcionar y otras utilidades como la reproducción de audio o vídeo desde medios externos– como la ranura para tarjetas SD o una toma USB que nos puede servir para memorias externas (o igualmente para cargar), el de comida que conectaremos al mechero (que tiene un detalle de lo más útil: un USB-A hembra de 10W que permite cargar otros dispositivos mientras lo estamos usando), un jack para conectar el audio al sistema de sonido del coche, entre otros.

Así funciona un Android Utilitario low cost

Así pues, una vez montada la ventosa y el bienhechor a nuestro estilo, colocaremos la pantalla fijándola en los ganchos y conectaremos la comida y el jack para el sonido para su puesta en marcha. La configuración original es rápida y no nos ha cubo problemas: la primera vez nos conectaremos por Bluetooth y Wi-Fi y ya el móvil reconoce la pantalla como un dispositivo Android Utilitario y Apple Carplay.

A partir de ese momento, podremos usarlo tanto con cable como de forma inalámbrica. La vía sin cable ha sido la opción por la que nos hemos decantado generalmente, ya que aunque añade un poco de latencia, consideramos que merece la pena en cuanto a comodidad (posteriormente de todo, ya hay un par de cables por la zona del salpicadero). Así, una vez enciendes la pantalla y entras al coche con el móvil previamente enlazado, se establece la conexión inmediatamente, con poco que envidiar a nuestro Seat Valeroso con radiodifusión doble DIN de serie con Android Utilitario y Apple Carplay.

A partir de aquí, la experiencia con Android Utilitario ha sido más que adecuada en términos de fluidez, abriendo las aplicaciones típicas que usamos para nuestros viajes periódicos: Google Maps, Waze, Spotify…cumpliendo la delegación para lo que fue comprado: cuando toca callejear mucho y para música y llamadas en viajes largos. Hemos notado alguna que otra desconexión puntual y de vez en cuando poco de dilación, pero solo en Android Utilitario y no en Apple Carplay. No obstante y según mi experiencia con el Seat Valeroso, el sistema de infoentretenimiento de Apple resulta más estable.

La pantalla ha cumplido con creces lo esperado a nivel de visión para un dispositivo de su precio:  la entrega de fulgor es lo suficientemente buena como para que se vea proporcionadamente incluso en días soleados (lo hemos probado en Huelva en diciembre) y igualmente de perplejidad, como puede hallarse en la imagen que hay cabal encima.  No obstante y en esos escenarios nocturnos, estaría proporcionadamente poder apearse un poco su brillo.

Eso sí, las siete pulgadas pueden suponer poco justas para mostrar tanta información como la UI de Android Auto Coolwalk (especialmente con varias ventanas a la vez, poco que hemos preferido no sacar partido por esto mismo), aunque nos sigue pareciendo mejor que en móvil.

Asimismo la sensibilidad táctil de la pantalla es mejorable, lo que puede hacer que en ocasiones te desesperes un poco si tienes que forzar una sucesión de chico para ejecutar una tarea, pero asegura proporcionadamente a toques para acciones simples como aclarar apps.

Hablemos del micrófono. Funciona proporcionadamente en llamadas, aunque en función del convexidad a la otra persona le puede montar poco de eco y cuando hay música la cosa cambia y hay ocasiones en las que los ‘Ok Google’ le cuesta detectarlo. Lo bueno es que cuando capta que estamos hablando, el micrófono capta proporcionadamente la orden y el dispositivo actúa en conscuencia de acuerdo con la petición.

Durante nuestra experiencia de uso hemos detectado que el dispositivo se calienta, lo que puede tornarse en un problema durante los meses de verano.

Conclusiones: merece mucho la pena (sin milagros)

El punto de partida era querer vestir cuanto menos parné, mejor y tener una pantalla para música, llamadas y mapas en ocasiones puntuales. Ambas cosas las cumple sobradamente esta pantalla con Android Auto y Apple CarPlay de importación que nos costó 28 euros en ofrecimiento. No esperábamos milagros, pero da proporcionado más de lo que cuesta.

El diseño es trotón pero suficientemente robusto para que quede firme y poderlo poner y quitar a menudo, la pantalla se ve aseado y tiene todos los puertos operativos. Sí, su tamaño y el hardware del dispositivo pasa preparación a nivel de visualización, agilidad e incluso temperatura, pero para un uso primordial y puntual es suficiente y lo preferimos frente al móvil.

Portada | Propia (Antonio Sabán)

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