Móviles
cuatro métodos distintos para lograrlo
Publicado
hace 2 añosen
Por
Iván Ramírez
El root no está tan de moda hoy en día como hace unos primaveras, pero siguen habiendo un montón de razones para rootear móviles Android, especialmente móviles antiguos que tienes en cajones y pueden tener un nuevo uso. Rootear un móvil Android puede ser complicado, aunque no por ello increíble.
Si estás pensando en rootear tu móvil y no sabes ni por dónde asomar, aquí te resumimos los cuatro principales métodos. Te servirán como un punto de partida para iniciarte en esta aventura que es obtener paso root en un móvil Android.
Antiguamente de rootear
Antiguamente de pulsar “el tallo rojo”, nunca está de más que recuerdes los inconvenientes de rootear un terminal. Aunque las herramientas y los servicios de protección han mejorado con el tiempo, la probabilidad de dejar el móvil inservible -comúnmente llamado brickeado– siguen estando ahí.
Por otro flanco, algunas herramientas de root intentan ocultar al sistema su existencia, pero no siempre lo consiguen. Esto supone que algunas aplicaciones podrían dejar de funcionar si detectan que el dispositivo está rooteado, como las apps de bancos o juegos como Pokémon Go. En los terminales que todavía están en seguro, encima puede suponer un problema si necesitas usar el servicio técnico oficial.
El root viene emparejado a unos riesgos. No procedas a no ser que comprendas y estés dispuesto a asumirlos
Con todo esto no queremos quitarte las ganas de rootear tu terminal. Los beneficios son muchos, aunque vienen emparejados con inconvenientes. Al final, serás tú quien deba ponderar los pros y los contras y osar qué te merece la pena, siempre bajo tu propia cuenta y peligro.
Con apps para Android
Empezamos nuestra directorio por el método más practicable, pero no por ello el más recomendable: las aplicaciones que te otorgan permiso de root con casi nada pulsar un tallo. Existir, existen, aunque su uso se limita a un puñado de modelos donde se han antitético agujeros de seguridad que pueden aprovecharse para obtener permisos de root (generalmente, modelos proporcionado antiguos). KingRoot es compatible desde Android 2.0 a 6.0.
Una aplicación popular en su momento era Kingo Root, a veces llamamiento King Root y con otras variantes. Técnicamente, funciona -en algunos terminales- pero tiene el problema de que posteriormente de obtener los permisos de root, no hay ningún control sobre lo que la aplicación hace o deja de hacer con tu móvil. Una alternativa es usarla sólo para obtener el permiso de root, con el móvil sin datos personales, y luego instalar otro gerente que sea más de fiar, como una traducción vieja de SuperSu.
Es el modo más rápido, pero no el más seguro y sólo habitable en un puñado de móviles antiguos
Usar una aplicación para rootear el móvil es sin duda el modo más sencillo, aunque solo habitable para un puñado de terminales de hace al menos un quinquenio. Dicho esto, es importante recapacitar que solo funcionan en ciertos modelos, por lo que no caigas en aplicaciones que prometen root con un clic en multitud de móviles, especialmente en terminales recientes.
Con apps para Windows
El concepto es exactamente el mismo al antedicho, pero llevado a término desde un PC en empleo de con una app para el móvil. El móvil debe estar conectado a tu PC mediante un cable USB, las opciones para desarrolladores deben estar activadas, así como la depuración USB. El propio KingRoot que mencionábamos antaño tiene una versión para Windows, aunque otros nombres conocidos, como OneClickRoot.
Las aplicaciones todo-en-uno para rootear desde Windows pueden hacer su trabajo con algunas restricciones menos que desde el móvil, aunque siguen teniendo los mismos problemas: su éxito solo está asegurado en un puñado de modelos. Eso sí, en los que funciona, funciona proporcionado perfectamente: pulsas un tallo y esperas hasta tener paso root.
No funciona siempre, pero cuando funciona es fielmente cosa de pulsar un tallo y esperar
El problema de seguridad es el mismo que en el caso antedicho. A diferencia de Magisk, de código amplio, debes creer en la palabra de los desarrolladores de estas aplicaciones de que lograrán paso root y nadie más. De nuevo, es recomendable que, si quieres probar suerte, lo hagas con un móvil sin datos, restaurado de fábrica.
Con Magisk
Magisk es una de las pocas herramientas de root que se mantiene activa y actualizada. El paso root es solo una parte de lo que ofrece Magisk, destacando además qué técnicamente es capaz de engañar a SafetyNet y que tiene módulos para todo listos para descargar y activar con pocos clics.
A diferencia de los bienes para rootear que veíamos antaño, Magisk es de código abierto, de modo que la comunidad de usuarios puede consultar qué hace y deja de hacer exactamente. Es, por consiguiente, un método relativamente seguro al menos en lo que a la privacidad de tus datos se refiere.
Magisk tiene la preeminencia de ser de código amplio, por lo que es más de fiar
Hay principalmente dos modos de instalar Magisk: con root y sin root. Obviamente, si quieres usar Magisk para tener paso de root, el primero se queda fuera, así que deberás en su empleo poder instarlarlo desde un Custom Recovery como TWRP. De igual modo, es posible instalar un Custom Recovery sin indigencia de root, por ejemplo con Odin, en móviles Samsung.
Flasheando
Hablando de Modo Recovery, éste es otro punto de paso para conseguir paso root, según las opciones que estén disponibles. Por ejemplo, en los móviles Samsung, se pueden flashear firmwares parcheados que incluyen el paso root como los de CF-Auto-Root directamente con ODIN.
En otros móviles, será necesario tener instalado un Modo Recovery personalizado como TWRP o el añejo CWM para flashear un archivo ZIP que incluya todo lo necesario para conseguir el paso root. El problema aquí es que no hay una posibilidad universal, sino que deberás encontrar la posibilidad exacta para tu maniquí concreto. Los foros de XDA son un excelente punto de partida para despabilarse las instrucciones y archivos necesarios para un gran número de móviles Android.
En la mayoría de los casos, te tocará despabilarse y seguir instrucciones precisas para rootear “a mano”
Este método es relativamente el más complicado de todos, pues necesitas encontrar las instrucciones y archivos concretos y seguirlas con precisión, aunque es además el más extendido. No te servirá, eso sí, en aquellos móviles que tienen el bootloader bloqueado, como los móviles Huawei recientes.