¿Cómo se juega a The Last Oricru? Así es su invención co-op

The Last Oricru acaba de ponerse a la traspaso hoy mismo bajo el sello Prime Matter en formatos PS5, Xbox Series y PC, y cuando conocimos a su director Pavel Jiří Strnad de GoldKnights tuvo a aceptablemente comentar poco de gameplay exclusivo para describir la propuesta militar y centrarse en bazas como su pantalla partida o su visión más indulgente de los soulslike.

Si queréis aprender más sobre el solaz ayer de decidiros a probarlo, en el vídeo bajo estas líneas tocamos varios detalles. Según Strnad, The Last Oricru tiene un sistema de combate al estilo soulslike que combina con una historia relatada mediante novelística ramificada, lo que da circunstancia “a muchas elecciones con enormes consecuencias” adentro de un “descomunal emoción polilla”.

Mediante esta ramificación, los desarrolladores quieren que los jugadores puedan conducirse una aventura aceptablemente distinta cada vez. ¿Y cuánto dura The Last Oricru? Strnad calcula que te lo puedes ocurrir en unas 15-20 horas de solaz, pero todas las decisiones y cambios posibles invitan a rejugarlo varias veces.

En el vídeo jugamos como los Ratkin, una de las dos razas en guerrilla durante la primera parte del solaz. El director asegura que “no hay atrevimiento buena o mala, cualquier sufragio es correcta y nosotros te mostramos las consecuencias”. La otra posibilidad habría sido seguir la ruta Naboru.

Pero sin duda “lo que más está gustando a la clan” es la posibilidad de recrearse a The Last Oricru a dobles, ya sea online o a pantalla dividida, en un “cooperativo de sofá al estilo Nintendo de la vieja escuela” (aunque The Last Oricru no sale para Switch ni para la concepción susodicho de PlayStation y Xbox). En este modo co-op, el segundo personaje siempre es un holograma del primero, con guiñada incluido a Hard Light. El ludópata diferente siempre es el que toma las decisiones, pero el inventario se comparte entre uno y otro. A diferencia de otros RPG, los personajes no se pueden caracterizar porque son diseños fijos de héroes destacados de la historia.

En líneas generales y a equivocación de nuestro examen de The Last Oricru en profundidad, Strnad concluye que “no es como Dark Souls, sino para un conocido más amplio, con un modo obvio que lo hace accesible incluso para quien no le gusta el apartado”.